Puntos clave para comprar
Selección de materiales: los materiales principales para los pernos de acero inoxidable son 304 y 316. 304 El acero inoxidable tiene buena resistencia a la corrosión y alta resistencia, adecuada para los campos industriales y civiles generales; 316 El acero inoxidable tiene una mejor resistencia a la corrosión, especialmente en entornos altamente corrosivos, como la industria oceánica o química.
Grado de resistencia: La calificación de resistencia de los pernos de acero inoxidable generalmente se clasifica en función de la resistencia a la tracción del material, como A2-70, A4-80, etc. Los pernos A2-70 tienen alta resistencia y resistencia a la corrosión, lo que los hace adecuados para aplicaciones que requieren conexiones de alta resistencia.
Tratamiento de la superficie: el método de tratamiento de superficie de los pernos de acero inoxidable afectará su resistencia a la corrosión y su estética. Los tratamientos de superficie comunes incluyen pulido, galvanización, ennegrecimiento, etc. El tratamiento con galvanización puede aumentar la capacidad de prevención de la óxido, mientras que el tratamiento ennegrecido puede mejorar la estética.
Escenarios de aplicación: los pernos de acero inoxidable se usan ampliamente en campos como construcción, maquinaria, ingeniería química y procesamiento de alimentos. En el campo de la arquitectura, los pernos de acero inoxidable se utilizan para fijar puertas, ventanas, paredes de cortina de vidrio, etc. En el campo de la maquinaria, se utiliza para conectar componentes como ejes de transmisión y cajas de cambios; Utilizado en el procesamiento de productos químicos y de alimentos para resistir los medios corrosivos.
Puntos clave para su uso
Adaptabilidad ambiental: los pernos de acero inoxidable funcionan bien en ambientes húmedos y corrosivos, pero se debe prestar atención a evitar la inmersión a largo plazo en el agua o los fuertes ambientes ácidos y álcalíes para evitar afectar su resistencia a la corrosión.
Precauciones de instalación: durante la instalación, asegúrese de que los pernos y las tuercas estén bien ajustados para evitar la falla de conexión debido a la flojencia. Use una llave de torque adecuada para un apriete para evitar el apriete y el daño de roscado.
Mantenimiento: verifique regularmente el estado de apriete y la condición de la superficie de los pernos, y reemplace los pernos dañados o sueltos de manera oportuna. En entornos corrosivos, se recomienda realizar regularmente el tratamiento de superficie para extender la vida útil.